Aprende a hacer esta práctica sexual sin riesgos y con éxito

Jueves 4 de Febrero del 2021

Sexo oral (Ilustración de Miguel Santamarina)

El sexo oral bien hecho puede ser muy placentero para el hombre y la mujer (Ilustración de Miguel Santamarina)

El sexo oral (cunnilingus o felación) es una de las prácticas más habituales en las relaciones sexuales. “Se dice que más del 85% de los adultos lo incluyen en sus encuentros, ya sea como preludio al coito o como práctica en sí”, señala Antonio Murillo, psicólogo y sexólogo de la Asociación de Especialistas en Sexología.  

En opinión de Francisca Molero, sexóloga clínica, ginecóloga y presidenta de la Federación Española de Sociedades de Sexología, “todo depende de la edad. En jóvenes y en adultos jóvenes es una práctica muy generalizada pero en mayores de 50 y 60 años no lo es tanto, aunque sí es habitual”. 

El sexo oral consiste en “la estimulación de los genitales, sobre todo, del glande del clítoris, del glande del pene, o el ano, usando para ello la boca, más concretamente los labios y la lengua”, describe Murillo. Es una práctica muy habitual en las relaciones sexuales porque, normalmente, es muy placentera.

Esto se debe, sobre todo, a que “el glande del pene tiene aproximadamente 4.000 terminaciones nerviosas y el clítoris cuenta con unas 8.000, lo que convierte a estas zonas del cuerpo en extremadamente sensibles a la recepción de estímulos”. Por esto, el sexo oral, bien realizado, puede producir “mucho placer y de la mejor calidad”, afirma Murillo.

El sexo oral puede ser tan potente de excitación que la persona que lo recibe “puede llegar rapidamente al orgasmo”, señala Molero, tanto en hombres como en mujeres.

El sexo oral hacia un hombre “consiste en estimular toda la zona del glande y del tronco del pene con la estimulación oral, con la lengua y con la boca”, indica. En la mujer, “la idea es estimular con la boca o la lengua la vulva o la zona del clítoris que es la más sensible y es donde se localizan los estímulos sexuales”.

“La sensación placentera de ambas prácticas (hombre y mujer) se produce gracias, entre otras cosas, a llevar un ritmo determinado y a saber dónde hay que detenerse más. Si el estímulo se mantiene con cierta intensidad, la excitación aumenta y puede llegar a producir el orgasmo, que en el hombre coincide con la eyaculación, pero en la mujer, no siempre”, indica la presidenta de la Federación Española de Sociedades de Sexología.

La persona que lo realiza, fisiológicamente, no recibe ningún placer, pero psicológicamente sí. “El hecho de querer provocar placer en otra persona, llevar a cabo las acciones para conseguirlo y ver los resultados, puede producir gran satisfacción, de forma similar a cuando se le da un masaje relajante a quien se quiere proporcionar bienestar o se cocina para hacer feliz a una persona especial”, apunta Murillo. 

Por otro lado, también es importante señalar que no a todo el mundo le gusta practicar el sexo oral. “Hay algunas personas que lo rechazan por el olor, por la textura de la zona o, simplemente porque no les gusta”, indica Molero. 

Las causas pueden ser muchas, pero Murillo destaca estas:

  1. Sentir asco al pensar en un contacto sucio y antihigiénico de la boca con los genitales, por donde se orina, se eyacula o se menstrúa.

  2. Tener creencias de que es un acto impuro, inmoral o indigno.

  3. Tener una educación o aprendizaje erróneo y negativo o nulo sobre el sexo oral.

  4. Desconocer la sexualidad y la reproducción. Hay personas que piensan que puede haber un embarazo no deseado al practicar sexo oral.

Cómo aumentar el placer en la mujer con el sexo oral

Es posible aumentar el placer de la mujer a través de la estimulación de la vulva con la boca si se siguen una serie de consejos. El primer de ellos, según los expertos, es, como en todas las prácticas sexuales, “que se haga sólo para disfrutar, para compartir y para comunicarse, de forma voluntaria y consensuada, y sin vulnerar derechos ni transgredir las leyes”, apunta Murillo. Esto es clave para poder disfrutar a partes iguales. 

El segundo punto que hay que tener en cuenta a la hora de aprender a dar más placer es saber qué le excita a cada persona. “Hay a quien le gusta la estimulación más fuerte o más suave, más rápida o más lenta, con cambios de ritmo o intensidad o más constantes”, señala Murillo. Además, añade el sexólogo, “también hay personas a las que en cada ocasión le apetece una forma u otra, según el grado de excitación”.

Otro punto importante, según Molero, es la fase previa al sexo oral. En su opinión, “es fundamental preparar el cuerpo de la mujer para que todo pueda fluir mejor y sentir más placer”. Para que la mujer lo disfrute, “es importante que esté preparada y que esté en una fase de excitación previa”. 

Teniendo en cuenta estos puntos, Murillo ofrece una serie de consejos para para practicar el sexo oral en la mujer con más éxito

  1. En el glande del clítoris hay aproximadamente 8.000 terminaciones nerviosas, lo que lo convierte en una zona muy sensible, por tanto, este será el centro del placer, donde hay que dedicar más estimulación, eso sí, siempre teniendo en cuenta que una estimulación demasiado directa puede ser excesiva y provocar rechazo en vez de placer.
     
  2. Las terminaciones nerviosas en la vagina están aproximadamente en el introito vaginal, es decir, en el primer tercio de su longitud, por lo que no es necesario introducir la lengua para conseguir dar placer. Es mejor centrarse en el clítoris.
     
  3. Toda la zona de las ingles y la vulva es muy sensible, por lo que resulta recomendable tener la barba bien afeitada o lo suficientemente larga como para no provocar irritaciones o molestias por una barba que pincha y que no deja concentrarse en disfrutar.

Pequeños trucos

El único truco de los expertos es que haya buena comunicación entre los miembros de la pareja. Según Murillo, “puede ser muy efectivo susurrar un “sííí´…”, “así...” o “sigue…”, o dirigir diciendo dulcemente algo como “más suave…”, “más rápido…” o “un poco más arriba…”.

Otros trucos serían: 

  • Mantener la vulva bien húmeda, con lubricante o con saliva. Los hay con sabores. 
     
  • Estimular el clítoris, con la lengua, con movimientos circulares, alternativos, o como si escribieras letras con la punta de la lengua.
     
  • Hacer una presión o intensidad y la velocidad de movimientos sobre el clítoris, mejor que sean uniformes, con pocos altibajos, para no desconcentrar.
     
  • Preparar un vaso de agua (o infusión) calentita y otro con agua fría (incluso con hielo), y dar un sorbito de uno de los vasos y chupar un poco la vulva, y alternar con los vasos, caliente y frío. Los cambios de temperatura pueden ser muy excitantes.
     
  • Utilizar juguetes eróticos, al mismo tiempo que la boca, para estimular la vulva, por ejemplo un pequeño vibrador.

Cómo dar más placer al hombre

Como en la mujer, lo primero que hay que tener en cuenta es la comunicación entre la pareja y que sea una práctica consensuada. Tras esto, algunos consejos para dar más placer al hombre con el sexo oral serían: 

  1. La zona más sensible del pene es el glande, con la corona del glande y el frenillo, sobre todo el frenillo. Centrar la atención ahí, estimulando con la lengua.
     
  2. Los factores a tener en cuenta para estimular al pene son: lubricación, temperatura y presión. La lubricación para la fricción o movimiento deslizante, se puede conseguir con lubricante o con saliva; la temperatura de la boca proporciona el calor adecuado; y la presión o intensidad de la fricción, puede conseguirse con los labios, aunque puede resultar agotador para la mandíbula y el cuello, por lo que puede ser mejor opción ayudarse con la mano para presionar y mover el pene.
     
  3. No usar los dientes, que puede ser molesto o incluso doloroso, ni introducir nada por la uretra, ni siquiera aire.
     
  4. Succionar un poco, puede ser muy agradable, pero hacerlo con mucha intensidad puede no serlo para algunas personas.

Cómo hacerlo de forma segura

Como en cualquier otra práctica, existen riesgos de contagio de infecciones de transmisión sexual por lo que “es importante adoptar una serie de medidas higiénicas y de prevención”, señala Molero, salvo exepciones. “Si existe la seguridad de que solamente se mantienen relaciones sexuales con la misma persona y nadie más, y que los dos están sanos, en principio no hay que temer nada”, apunta Murillo.

Si no es así, “lo mejor es usar preservativo siempre”, tanto en el cunilingus como en la felación. En el caso del sexo oral, “al hacer una felación, lo mejor es ponerse un preservativo, y en el caso de hacer un cunnilingus, se comercializan barreras de látex”, informa Murillo. 

También es importante la limpieza. “Es recomendable estar lo más limpios posible al tener cualquier contacto íntimo con otra persona. Lo mismo que es recomendable tener limpia la boca cuando se va a besar”, de hecho, según señala Murillo, “la boca puede tener más microorganismos que los genitales”.

Al igual que la limpieza, orinar previamente es lo más recomendable “para evitar interrupciones” e infecciones urinarias.